Crazy for you .privado.

Recuerdo del primer mensaje :

Una nueva crisis me había obligado a volver a mi segundo hogar después de un lavado de estomago, pero para mi sorpresa no fue el lugar de siempre y mezcladas con las caras normales había también hombres, aunque dormían en cuartos separados. Me dirigía a mi dormitorio después del baño matutino cuando en mi camino me encontré con betsy gritándole a un pobre chico, sin pensarlo mucho fui a donde estaban y jale del brazo al chico -cuando ella te grite lo que menos debes hacer es detenerte- le indique una vez que estábamos lo suficientemente lejos.

Lo único bueno —y a fin de cuentas no tanto porque era igual de miserable que yo— es que compartíamos la misma mierda respecto a la familia. – ¿Conoces a tu familia biológica? – pregunté mirándole cuando se sentó a mi lado. – Yo no y busqué, pero no tuve mucha suerte. Aunque si me dejaron supongo es por algo y no creo me quieran de regreso en su vida o algo así.

Negue levemente cuando me pregunto por mi familia –no- suspire al tiempo que sobaba mi brazo derecho –pero supongo que si me dejaron es porque no deseaban saber de mi- sonrei levemente –pero veamos el lado bueno- mire alrededor y rei de manera amarga –bueno al menos te conocí- el me caia bien y parecia un buen chico, aunque era mejor que terminar hablando con mi compañera de cuarto.

También tuvimos la misma suerte de mierda respecto a los padres biológicos y pensábamos parecido respecto a la dejada. – Somos demasiado buenos para ellos ¿sabes? – dije con una sonrisa para animarnos a los dos. – Aunque me gustaría verlos para decirles unas cuantas cosas – confesé antes de mirarle y sonreírle por sus bonitas palabras. – Es cierto, eres buena onda, Dorothy.

Sonrei cuando dijo que eramos demasiado buenos, aunque yo era un fenómeno y tal vez por eso ellos se habían ido –si, claro- le secunde no muy convencida. -¿Verlos?, ¿Qué les dirias?- yo tenia mas bien muchas preguntas que hacerles, aunque seguro que cuando les preguntara porque me abandonaron me terminarían diciendo que era un fenómeno. Le di un leve golpe con mi hombro en el suyo –y tu, ademas eres excelente escuchando y también me agradas muco Elliot- era un buen chico y por nada del mundo deseaba asustarlo como a mi ultimo intento de amistad.

Cuando me preguntó que cosas le diría terminé suspirando sin querer. – Primero les preguntaría por qué me abandonaron y ya luego por qué jamás hicieron contacto conmigo – añadí omitiendo la mierda de lo que soy porque que estuviéramos en una residencia de locos no quería decir que quisiese que me viera como tal. Porque decirle "Eh, Dorothy soy un monstruo que se hace lobo" no estaba dentro de los parámetros de normalidad. – Y ya luego les insultaría, supongo – admití encogiéndome de hombros antes de sonreír por sus palabras. – Algún día saldremos de aquí e iremos a comer a mc donalds como cualquier chico de nuestra edad.

Sabia que no era el momento aun asi sonreí al escuchar aquellas preguntas –es lo mismo que yo les diría- termine por suspirar, la verdad que muchas veces me pregunte si ellos sabían que yo era un fenómeno y por eso me abandonaban. –Yo no tengo rencor en contra de ellos, es simplemente que me sigo preguntando ¿porque?- no podría insultarles, ellos me dieron la vida y tal vez creyeron que lo mejor para mi era abandonarme en la puerta de un orfanato. Me sobe el estómago cuando hablo de mc donals –o comer pizza o simplemente cambiar por un lugar sin rejas o custodios- agregue de manera soñadora

Otra cosa en la que concordábamos los dos. – Y es una pregunta que nos perseguirá por siempre porque no tenemos idea de qué pasó para que nos dejaran, pero cuanto más lo pienso se que es peor – admití mirando como el sol se ocultaba bajo algunas nubes haciendo el sitio un poco más oscuro y triste, porque así lo veía yo. – Como si fuéramos a tomar un cuchillo y matar a todos – bufé mirando al de seguridad que nos veía de reojo de vez en cuando. – Nos ganaremos algo de buen comportamiento e iremos a Mc Donalds en algún momento; te lo prometo. 

Suspire al tiempo que asentía al tiempo que llevaba mi mano a su espalda dudando por un momento antes de acariciar levemente su espalda a tratando de reconfortarlo –si, pero es mejor dejar de pensarlo no nos hace nada bien- yo lo sabía mas que de sobra aunque cuando tenia aquellos lapsos depresivos era lo primero que se me venía a la cabeza. Rei cuando hablo del cuchillo –bueno debes de admitir que no todos son asi, aunque a los peligrosos los tienen sedados- a veces tenia pena por ellos, pero yo no podia hacer nada. –Buena conducta- repeti –bueno supongo que puedo acostarme temprano, tomarme todas mis drogas y asistir a las dichosas terapias. Mi motivación sera la hamburguesa con doble queso- mire hacia el cielo, las nubes en particular –hoy hay algunas nubes chistosas, como esa que parece un borrego- señale la nube

Era bueno tener a alguien por lo menos con quien poder pasar el rato y aunque estuviese en un centro de salud mental y Dorothy pudiera comportarse bien ahora y luego tener un brote psicótico, me caía bien. Le sonreí cuando me palmeó la espalda y reí con sus disparates. – Uy las drogas, a mi me quiesieron dar, pero no las trague – confesé antes de ver las nubes y señalar una con forma curiosa. – Esa tiene forma dragón o un híbrido de dragón porque tiene medio forma de león también.

Estuvimos discutiendo de las formas de las nubes hasta que el sol cayó y tuvimos que entrar. – Supongo te veo para la hora de la cena o al rato.

Suspire cuando dijo que no se había tomado sus pastillas –en mi caso quisiera hacer lo mismo, pero- me encogi de hombros sin terminar la frase, aun en un manicomio decir que tenia tendencias suicidas me daba pena. Me enfoque a ver las nubes –si, es gracioso o esa que tiene forma de ave- señale otra nube.


El sol no tardo en ocultarse y cuando aquello paso los custodios nos comenzaron a escoltar cual criminales al interior –si, cuídate mucho- me fui a mi habitación y fue raro porque mi compañera de habitación no estaba, ademas que la luz estaba apagada, aunque supuse que se había fundido la lámpara por lo que entre pero termine por pisar algo, cuando me agache a ver que era me encontré con que mi compañera estaba tirada en el suelo muerta, al girarme y querer correr para pedir ayuda algo me pego en la cabeza y no supe mas.

No podía dormir nunca por las noches con tanto griterio así que en cuanto tuve la oportunidad me escapé de la habitación y fui investigando los pasillos evitando nadie me viese. E iba bien hasta que mirando por los cristales de las puertas vi a Dorothy tirada en el suelo. Empujé la puerta usando la fuerza que me dejó aquí en primer lugar. – Dorothy – le moví esperando despertase y casi grité cuando vi a la otra chica tirada en el suelo con sangre. Tomé en brazos a la rubia y salí de allí deteniéndome a medio camino cuando uno de los guardias nos vio.

Al despertar me agarre la cabeza aun mareada por el golpe, pero el golpe paso a ser lo de menos cuando mire el rostro de Elliot quien era el que me llevaba en brazos –suéltame- le dije asustada, comence a forcejear con el y escuche a un enfermero ordenarle que me dejara -¿Por qué? Yo solo queria ser buena- le reproche algo triste ya que el era mi primer amigo en mucho tiempo y ahora estaba totalmente confundida.

Me descolocó que me pidiera la bajara y eso hice además de que el enfermero estaba ahí regañándonos. Suspiré. – Pensé que necesitabas ayuda... Pensé que... – dije y me detuve. – Olvídalo – añadí antes de encarar al tipo para decirle ella dormía y yo la saqué de su cama para molestar nada más. Dicho eso, me regañó y me tomó del brazo para llevarme a mi habitación. Me volteé para mirarla una vez más.

Negué levemente –no mientas- murmure –¿qué le hiciste a mi compañera?- pregunte asustada -¿Por qué?- pero fue inútil seguir preguntando ya que el se fue con aquel enfermero y yo me quede confundida sin saber que habia pasado, regrese temerosa a mi habitación pero al buscar a mi compañera o mejor dicho su cuerpo no encontré rastros de ella, iba a ir con la enfermera de guardia pero al darme la vuelta vi a alguien que se me acercaba –vete de aquí Elliot- le dije molesta, pero al ver de cerca su cara y con ayuda de la poca luz que se colaba por la ventana vi que no era el, puse mis manos al frente para defenderme y de pronto el hombre salio volando por el aire y entonces comencé a correr asustada, al ir al modulo de vigilancia vi que no habia nadie y entonces seguí corriendo tratando de conseguir algo de ayuda.