I Didn't expect to find you here {John}

Pisar territorio francés me traía mucha nostalgia de épocas pasadas. Estaba en el mismo sitio donde había conocido a John por primera vez y pensar en eso solo me traía nostalgia aunque era bueno saber que había conseguido transformarme en vampiro. Toda esta nueva vida tenía sus ventajas y estaba perfectamente a gusto con ella, pero no podía negar que extrañaba a aquel hombre que en su momento estaba comprometido conmigo. Quizá hasta se haya encontrado un nuevo amor, todo era posible por mucho que me costará creerlo de él, además era lo mejor que podría pasarle ¿no?. Al menos lo era hasta que yo me decidiera a encontrarlo y traerlo a una mejor vida. De momento solo esperaba que pasara un poco más de tiempo para ir a buscarle.

El sol ya estaba pronto a esconderse y no tenía problemas de andar por la calle una hora hasta que acabará por caer en el horizonte, después de todo tendría que pasar bastante para que pudiera hacerme mal. Vagué por las calles en busca de algo que comprarme, a veces salir a cazar me arruinaba un poco todas las prendas bonitas que tenía. Caminé y me encontré con un escaparate que tenía un conjunto de lo más hermoso y si todo marchaba bien sería mío en menos de lo que cantara un gallo, al menos eso pensé hasta que quise entrar allí y me topé con lo que menos pensé en mi vida. —John— murmuré con el ceño fruncido al ver que iba de la mano con una rubia.

No hace más de tres horas que acaba de bajar del avión, en realidad yo no deseaba venir a este lugar, Francia me traía demasiados recuerdos tanto buenos como malos, pero los que sobresalían sin duda eran los malos, gracias a eso ahora llevo esta nueva vida, un cazador de vampiros, esos malditos engendros que si muchísimos años atrás me hubieran dicho existían no lo hubiera creído, incluso me hubiera burlado de tal cosa. Por desgracia si existen y lo descubrí de la peor forma, un maldito vampiro fue quien acabo con la vida del amor de mi vida, por eso mismo ahora me dedico a buscar y acabar con ellos, es un trabajo bastante peligroso, pero no me importa, mi objetivo es encontrar al maldito vampiro que acabo con la vida de mi amada Julie, no descansare hasta encontrarlo y acabar con su existencia, jure vengarme.

Han pasado ya casi cinco años, mi vida cambio por completo desde entonces, aunque ahora no solo dependo de matar a malditos vampiros, tengo a mi lado una chica, Phoebe, es maravillosa... esta perdidamente enamorada de mi y bueno yo intento corresponderle de la misma forma, pero aun me es imposible ya que el recuerdo de lo que sentía o aun siento por Julie es demasiado fuerte. Phoebe no tiene idea de lo que me dedico, solo sabe que tengo una trabajo peligroso y vaya que lo es, en varias ocasiones llegue herido a casa, ella insiste en que deje ese empleo pero es algo que no hare nunca, no hasta conseguir vengar la muerte de Julie. Lo único que me afecta un poco es que le oculto estas cosas a Phoebe, por protección, en realidad no deseo conozca de la existencia de freaks en este mundo, que tampoco se entere lo que en realidad hago.

Con ella trato de llevar una vida normal, no lo consigo del todo pero me esfuerzo por hacerla feliz y si estaba ahora en este lugar es porque ella me lo pidió, una semana lejos de la rutina, pasar unos días juntos, disfrutar... creo que su idea no sonaba tan mal y aquí estaba. Luego de de registrarnos en el hotel, dejar nuestro equipaje mis planes eran tumbarme en la cama a dormir un poco, estaba algo agotado por el viaje. Mis planes no eran los mismos para Phoebe ya que ella en cuanto dejamos en equipaje tomo mi mano para jalonearme y salir de prisa de la habitación ¿cómo es que creía que íbamos a quedarnos encerrados entre cuatro paredes? por supuesto que no y ella me lo dejo claro, no quiere perderse ni un momento...

Caminamos ambos en la calle tomados de la mano, me parecía bastante gracioso verla como se emocionaba, solo esperaba no me dijera fuéramos de compras, no en este momento, quizá mañana cuando esté un poco descansado sí, pero hoy definitivamente no estaba de humor como para pasar varias horas en las tiendas. No es que venga de amargado, en realidad disfruto las cosas que hago con ella, pero hoy no me sentía del todo bien... debe ser por el viaje o por el lugar en el que me encuentro. Solté un suspiro, como siga así ella se dará cuenta y me preguntara... fije mi mirada en ella y le dedique una pequeña sonrisa.

Iba a acercarme para darle un pequeño beso en sus labios cuando escuche mi nombre haciendo que desviara la mirada para ver de quien se trataba y no podía creer a quien tenía frente a mi ¿Es Julie? ¿Cómo demonios es que esta frente a mi? Ella esta… está muerta ¿Acaso si me quede dormido en la habitación y esta salida solo es un sueño? Debe de ser eso porque no le encontraba ninguna explicación lógica del porque Julie esta parada frente a mí, pero lo del sueño quedo desechado cuando sentí un apretón en mi mano y la voz de Phoebe preguntando quien es la chica. Estaba completamente sorprendido, casi que podría caerme de espaldas en el suelo. No aparte mi mirada de ella y algo debía decir, pero por la sorpresa me quede sin palabras. – ¿Ju... Julie? – Su nombre fue lo único que logre decir luego de quedarme como idiota completamente mudo y ni siquiera estaba seguro de que fuera ella en realidad.

Era inevitable ocultar mi cara de idiota confundido, sorprendido, es que era imposible que Julie esté frente a mí, ella está muerta… debe ser una alucinación debido al sitio en el que me encuentro o ella tiene una gemela que nunca supe, pero definitivamente no es ella, no puede ser… Mi mirada la estudio con detenimiento, ni siquiera podía decir algo mas, necesitaba escuchar que me respondiera, era obvio que solo la estaba confundiendo y ella me lo diría… ¿pero confundiendo con quien por dios? Si es idéntica a Julie, gemela dudo que tenga si así hubiera sido lo sabría, pero no ¿entonces como demonios se explica esto?

Fije mi mirada en su rostro abriendo los ojos sorprendido al escuchar en mi mente las palabras que ni siquiera salieron de su boca ¿ahora esto? Y al final me confirmo que si es Julie… ¿Cómo es posible que sea ella? Apreté un poco mi mano con algo de fuerza no dándome cuenta que lastimaba a Phoebe hasta que escuche su quejido haciendo que la soltara. – Luces bastante bien para ser alguien que murió hace años – Le dije molesto sin dejar de mirarla esperando ella volviera su vista a mí y me explicara por una maldita vez. Como no me iba a molestar si la mujer, mi prometida la que creí muerta hace años aparece frente a mi con vida.

Realmente me sentía un poco culpable por no haber dado rastro alguno de mi paradero en todos estos años al ver su rostro de desconcierto al verme. Admito que podría haber enviado una carta, un mail, un mensaje de texto o lo que fuese para comunicarle que no me habían matado como él pensaba, pero si lo hacía él preguntaría el por qué y hubiese estado en serios problemas. Quizá hubiese tenido menos de los que ahora se me avecinaban, pero pensar en lo que pudiese haber sido no me ayudaba en nada en el presente.

Miré de reojo el agarre de su mano viendo como se soltaba de la misma nada, bueno en realidad porque el morocho le había apretado un poco demás. Le miré con el rostro sorprendido cuando dijo eso y pudo palpar la molestia en el tono de su voz. Solté un pequeño suspiro y le miré a los ojos perdiéndome en ellos nuevamente, como lo había hecho cuando era una simple mortal. –Es algo un tanto complicado de contar en plena avenida– me excuse con una leve mueca y mirando de reojo a su acompañante dándole a entender que tampoco era prudente que ella presenciará eso tampoco.

Como no iba a estar molesto cuando todos estos años la creí muerta y ahora aparece de la nada o bueno me la tope de la nada. Estuve como idiota todos estos años sufriendo por su muerte, incluso cambie toda mi vida por completo y lo que ahora soy es por culpa de ella, mi molestia tiene una justificación, pero ahora solo falta escuchar una gran explicación a todo esto. ¿Qué hubiera pasado si yo no estuviera aquí ahora? Seguiría viviendo creyendo ella estaba muerta, creo que hubiera preferido eso, vivir aun en el engaño.

Solté un pequeño suspiro al escuchar su respuesta, ja! Un tanto complicado yo diría bastante complicado, pero tiene razón no podíamos hablar de esto en plena avenida y mucho menos delante de Phoebe. Desvié la vista hacia Phoebe, carraspee un poco ¿ahora qué le decía? Cuando iba a abrir la boca para hablar sentí su mano en mi mejilla dándome una suave caricia y diciéndome que me vería mas tarde en el hotel, me dio un beso en los labios y camino marchándose… Parece que me entendía perfectamente, aunque creo más tarde me preguntara o yo le debería dar una explicación pero primero yo la necesitaba saber. Fije mi mirada en Julie. –No esperaras te invite a tomar un café para que me cuentes el porqué de tu engaño – Dije sin poder ocultar mi molestia.

Miles de veces deseaba tanto volver a verla con vida, suplicando porque su muerte solo hubiera sido una mala pesadilla y ahora eso que tanto anhelaba se convertía en realidad… Esta viva, debería darme alegría, pero como iba a alegrarme cuanto aparece de la nada luego de tantos años ¿acaso todo era parte de su plan para deshacerse de mí? Fingiendo su muerte y desaparecer… aunque vaya forma de desaparecer viniendo al sitio en el cual nos conocimos. Por eso no podía darme ni una pizca de emoción el saber que está viva, por ahora solo estaba molesto y quería escuchar su explicación, debe de ser bastante buena como para que me haya engañado a tal grado. Me hice a un lado cuando escuche la señora quejarse para permitirle el paso y desvié la mirada hacia la cafetería que me señalo, aunque no me agradaba nada tener que irme a sentar en una mesa con ella como si nada hubiera sucedido, pero necesitaba saber. Solté un suspiro… – Entonces de prisa – Le respondí sin mirarla y comencé a caminar hacia la cafetería.

¿Todo esto estaba sucediendo en verdad o todo era producto de un sueño? Luego de su muerte deseaba tanto ella estuviera con vida que la única manera en que se hacía eso posible es cuando aparecía en mis sueños, pero esto no se trataba de ningún sueño, era bastante real... ella está viva y yo no podía alegrarme por tal cosa, estaba molesto, confundido, decepcionado. No debí haber aceptado ir a esa cafetería con ella pero necesitaba explicaciones y una parte de mi ya se estaba imaginando lo peor. Sacudí levemente mi cabeza para salir de mis pensamientos y seguir caminando hasta llegar a la cafetería sin atreverme siquiera a voltear a mirarla a ella. Al llegar entramos y ahora las cosas empeoraban ya que a mi cabeza vinieron recuerdos del momento más feliz e inolvidable que tuve con ella, joder definitivamente estar aquí es muy mala idea. Volví a sacudir levemente mi cabeza como si de esa forma pudiera ahuyentar esos recuerdos. No dije palabra alguna simplemente eche un rápido vistazo al lugar y espere a que ella indicara donde ir a sentarnos, la seguí hasta la mesa que eligió cerca de la ventana, espere a que se sentara para yo hacer lo mismo frente a ella. Sin más remedio clave la mirada en sus ojos al escuchar su saludo. – Ahórrate el saludo, estoy esperando tus magnificas explicaciones que tienes que darme   – Dije molesto sin dejar de mirarla, por dios estaba igual o más hermosa que cuando fue la última vez que la vi con vida. Pero que mierda, ¿estoy fijándome en su belleza justo ahora?

Estaba a punto de desviar la mirada hacia cualquier otro lado porque parecía idiota sin dejar de mirarla, a pesar de todo ella seguía causando el mismo efecto en mi,  cuando mi mirada se clavaba en sus ojos me olvidaba completamente del mundo y la gente que nos rodeaba, es como si este desapareciera y solo nos encontráramos los dos, si bastante cursi, pero siempre fue así… a pesar de todo aun sigue siendo así y eso me molestaba demasiado, me sentía imbécil. Seguro ella se dará cuenta de tal cosa y no seré mas que su burla, total ya me engaño fingiendo su muerte y… Menos mal ella desvió la mirada y no fue necesario yo lo hiciera porque me estaba costando bastante. Coloque una de mis manos encima de la mesa la cual moví un poco acercándola a sus manos entrelazadas, por un momento me dieron ganas de tomar una de sus manos no solo para confirmar que no se trataba de ningún fantasma que estaba frente a mí, más bien porque una de las tantas cosas que disfrutaba de ella era acariciar su suave piel. Enserio me estaba comportando como un idiota, aleje rápido mi mano al escuchar sus palabras… ¿lo sabía? Mierda a quien engaño, ya tenía idea que diablos es lo que sucede con ella, es la única explicación lógica del porque ella está con vida o al menos una vida diferente que lleva. Apreté los puños de mis manos con fuerza conteniéndome para no decirle tantas cosas y al final cuando me dijo su estúpido lo lamento golpee con algo de fuerza la mesa con mi mano aun en puño. – ¿Lo lamentas?– Pregunte molesto elevando el tono de mi voz que obviamente todo mundo escucho y ya estaban mirando hacia nuestra mesa. – No tienes ni puta idea de todo lo que pase creyendo estabas muerta – Trate de mantener un tono de voz moderado, pero mi molestia era tan grande que me estaba siendo imposible no hablar bien sin estar llamando la atención de la gente del lugar. – Y ahora apareces así como si nada y siendo… - Ni siquiera me atreví a decirlo, no por miedo porque no les temía a esos malditos sino que les tenía un odio creyendo que un idiota le había arrebatado la vida a mi prometida pero parece que la hizo una de ellos.