When you call my name is like a little prayer

No habia nada mas que hacer, habia vuelto. Cuando habia llegado a casa del trabajo aquella mañana para arreglarme e ir a cenar con Paul me extraño el ver aquellos dos mensajes de mi contestador. Casi nadie tenia el numero fijo del apartamento, todo el mundo tenia mi numero de movil o el de la casa de Paul, ya que nuestros amigos solian localizarme alli siempre, de modo que me acerque hasta el aparato casi como si fuera un animal peligroso. El primero era un mensaje de Monique diciendome que cenariamos juntas en Sant Regis a las 9 el dia de su cumpleaños, y el otro de la Dr. McGregor. Los ultimos analisis estaban raros, tenia que volver para hacerme mas pruebas y comprobar que el cancer no habia vuelto.

Me quede unos minutos con el auricular pegado a mi oido, volvi a escuchar el mensaje y, como si fuera un robot cogi nuevamente mi bolso y sali nuevamente a la calle, sin acordarme de recoger el telefono que habia soltado en la mesilla al entrar. Caminando por las calles ya casi a oscuras acabe llegando a la iglesia, metiendome dentro sin ni siquiera pensarlo y sentandome en uno de los bancos, mirando la virgen del retablo. Todo aquello me hizo pensar en mi madre y, inmediatamente me puse de rodillas cerrando los ojos. Jocelyn Withcomb cuando se enteraba de estas cosas acudia a la iglesia y rezaba, pero yo simplemente permaneci alli con mis ojos cerrados fuertemente, intentando mantener mi mente en blanco pero unicamente pudiendo rememorar mi habitacion en el hospital, a Paul a mi lado llorando... Esas imagenes se mezclaban conmigo a los pies de la cama de mi madre antes de que muriera y, cuando me quise dar cuenta, las lagrimas bajaban por mis mejillas.

Estaba por estos lugares, cmo se llamaban? asi Seattle un pequeño lugar de el estado de Washington, repetidamente la betsia que llebaba en mi estaba oprimida de donde soy por lo que preferia irme a buscar nuevos lugares y reconfrontarme.
Estaba ya desde hace un tiempo caminando el aire alborotaba el cabelo un poco largo que traia, recorriendo todo la piel debajo de mi cabello, y la chaparra de cuerop negra que traia, era uno de esos dias, frios pero me gustaba, ademas de que ya era un poco tarde hasta que pase por un lugar algo cálido... pero que era, regrese y me quede parado a mitad de la puerta abierta a diestra y siniestra y no habia nadie, bueno al menos no se veia nadie y me daba curiosidad.
Por lo que decidi entrar mirando a cada lado tenia un estilo pues algo decente... asi que mire hacia arriba y candelabros bajaban, si fuera creyente de esto no se me hubera parecido bello pero si estaba geniaMe acerque a ella, seria una chica mas a la cual me iba a hechar asi que por que no hacerla de super heroe del dia?... camine y me sente junto a ella guardando silencio un poco y despues... -puedo ayudarte en algo?- le pregunte mirando hacia al frente

Perdida en mis pensamientos como estaba apenas fui consciente de la voz a mi lado hasta alzar la cabeza y ver al hombre. Menudo hombre. Me miraba fijamente, como si esperara que dijera algo y fue entonces que note mis lagrimas y las aparte rapidamente con la mano. Pocas cosas odiaba mas que que me vieran llorar. - No... No es nada... - dije sintiendo mi voz temblorosa y mirando una ultima vez el retablo antes de ponerme de pie para salir de alli. "Genial Mary, estas dando un espectaculo". Paul se preguntaria donde estaba y... Fue entonces que vi sus ojos, demasiado azules para no ser otra cosa mas que lentillas y note mi garganta seca. - Per... Perdona. - dije esquivandole para salir de aquel lugar.

la mire, y estaba llorando cuando me di cuenta mi ceño estaba fruncido, y moria de curiocidad por saber que era para hacerla llorar, era bien sabido por todos que yo me tiraba a cualquiera pero ante toda, eran mujeres que bien o mal que fuesen no me gustaba que lloracen, bueno no al menos enfrente mio.
Cuando ella salio estuvo enfrente mio y la mire directamente a los ojos, era... hermosos, mierda que le pasaria, la curiocidad habia matado al gato pero yo etsaba queriendo me matara a mi, por lo que antes de que se fuera corri a ella -oyeee, oyeee, espera...- dije mientras podia posicionarme junto a ella y mirandola a los ojos sonrriendo de lado -sere cotilla y estas en tu derecho a mandarme a volar pero, que te pasa? puedo ayudar en algo? en verdad...- dije apretando los labios indeciso si de lo que habia hechoi estaba bien, o no...

Me lance hacia la puerta en un intento de huir pero aquellas largas piernas me alcanzaron al poco, poniendose a caminar a mi lado. ¿Por que un chico como aquel se preocupaba por lo que me pudiera pasar? Era mas del tipo que sonreia desde una portada de revista, inalcanzable a la chicas del monton como yo. Me pregunto que me pasaba y negue con la cabeza sintiendo el aire frio al salir. - Nada, solo... Nada. - dije apretando mi chaqueta. - ¿Por que te molestas en preguntar si quiera? ¿No tienes otros sitio donde estar? - dije odiando lo fria que sono mi voz. No me gustaba ser tan brusca, pero realmente no era buena compañia para nadie en ese momento.

me quede caqllado mirandola irguiendome muy bien, quedando muy derecho mirandola y encogiendome de hombros para meter las manos en los bolsillos de mi pantalon, era cierto lo que ella decia, de cuando aca? y claro que tenia otro sitios pero... ninguno me apetecia, este tipo de lugares era lo que yo necesitaba.
Necesitaba paz, para que mi bestia interior se calmara, sino, esto si seria una catastrofe de verdad... -si no fuera no llorarias, y si, prodria ser que tuviera en mente algunos sitios a donde ir, pero estoy aqui por algo y me gustaria saber que te pasa, para poder ayudar- y despues llevarte a la cama, claro ese era el plan principal, pero algo dentro de mi se incomodaba y esto ya era mas quie llevarla a la cama.

Negue con la cabeza bufando. Un chico solidario, con eso habia topado. No me extrañaba con el expectaculo que estaba haciendo en la iglesia habia querido ayudar pero.. A mi no se me podia ayudar. Segui caminando sin saber muy bien a donde iba. - No puedes ayudarme, y estoy bien... Solo necesito estar sola. - dije negandome a mirarle. En algun momento se tenia que cansar de seguirme.

suspire mirandola andar de nuevo, pero que mierdas, desde cuando yo me preocupaba mucho por alguien? no era mas que una chiquilla, pero la conciencia me habia gando y la estaba siguiendo a paso humano -no se que te pasa, puede que para ti sea mejor estar sola, pero... yo puedo escucharte, aveces es bueno desahogarse con alguien que no conoces, no es que fuera a decirles a tus conocidos o algo asi- dije serio mientras la seguia por detras, queria saber de verdad, esto ya no era el plan inicial, esto se habia transformado en curiocidad y en ganas de quitarle en mente eso que la atormentaba.

Me pare enfrentandolo, mirandole fijamente. - ¿Crees que hablar con un desconocido me va a hacer sentir mejor? Nada puede hacer que este mejor... - dije bajando el tono negando con la cabeza echandome a andar de nuevo.

corri para quedar engfrente de ella, el aire empezaba a estar muuuuy frio por lo que me pare enfrente de ella -y por que estas asi? algo puedo yo hacer parta que por lo menos lo olvides si es que de verdad no hay remedio, te invito un cafe si quieres, no voy a desistir, asi tenga que seguirte a tu casa o a donde vayas y llames a la policia...- dije mirandola a los ojos

Frene de golpe para evitar por poco el chocar de frente contra el, obligandome a no dejarme cautivar de nuevo por aquellos ojos. - ¿Que mas te da lo que me pase? ¿Eres un buen samaritano o un acosador? - le pregunte enarcando una ceja, soltando un suspiro. - Mira, siendo ser una perra ahora mismo pero... No quiero un cafe, ni hablar ni... Solo necesito estar sola.

me relami los mirandole, estaba muy a la ofensiva, entonces si era algo malo que le pasara, sino ya lo hubiera soltado, pero que era taqan malo? se le murio alguien?, rompio con un novio? no eso era demasiado estupido, frunci mi ceño en pensar algo asi como una enfermedad peor no sabia que era -solo soy alguien que quiere ayudarte, mira, no soy asi, ni siquiera se por que lo hago, pero el verte ahi dentro llorando, no se... me ha preocupado,- dije tragando saliva para cuando la vi suspire -y un abrazo? no te hace falta uno?- dije mirandole a los ojos

Le segui mirando fijamente sin saber que hacer o decir para que se fuera. - No quiero ayuda, aunque pudieras darmela... Mira, siento el espectaculo ahi dentro, no se porque me puse asi pero... - comence a decir escuchando entonces lo del abrazo bufando. - Eres raro, sabes? - dije sin poder evitar soltar una carcajada. - ¿Quien va por ahi regalando abrazos a desconocidos?

le sonrei encogiendome de hombros -no hace falta, aveces llorar es bueno... y ningun espectaculo, tu estabas en tu... como se llama? oraciones? yo solo entre a ver como era esa cos apor dentro y te vi y pues quise ayudar - dije encogiendombe de hombros para solta una risilla y alzar la mano como pidiendo la palabra en la escuela -pues si tu me dejas yo puedo ir empezando a regalar abrazos a desconocidos empezando contigo claro- le sonrei -venga ya vamos, se que quieres, un cafe y ya, jamas me volveras a ver en tu vida vale?- le puse ojos de cordero

Negue con la cabeza. - No rezaba.. - dije como si necesitara explicarme ante el. - Simplemente senti la necesidad de entrar. - añadi encogiendome de hombros mirandole de nuevo, negando con la cabeza suspirando luego. - En realidad... Mi novio estara preocupado por mi, deberia volver a casa. - dije bajando la cabeza. Enfrentarme a Paul y decirle que todo habia vuelto no era algo que quisiera hacer, verle romperse de nuevo me doleria mas que la enfermedad en si.

asenti -bueno, gracias a esa necesidad ya te conoci y doy gracias al cielo- me rei para cuando lo escuche la risa se me borro y suspire negando -no me pienso propasar, mandale un mensaje que iras por un cfae o algo, ademas si fuera que se preocupara ya te hubiera llamado, dale solo quiero ayudarte y no pienso desistir he dicho- dije cruzandome de brazos

Carraspee al sentir como perdia la sonrisa alejandome un paso. - No traje mi telefono y... No creo que el estuviera muy contento con la idea. - dije bajando la cabeza

senti que hice una cara como puchero y sauq emi cel -toma llamale si quieres... venga solo sera una charla no creo que sea tabn borde el tio-. le dije entrecerrando mis ojos sonrriendo

Mire su movil y negue sin acercarme a tomarlo. - ¿Por que insistes tanto? - le pregunte. Tenia que esconder algo, nadie era tan amable e insistente por nada...

me mordi el labio y suspire -ni yo mismo se, es una mierda no saberlo, me he preocupado por ti, ademas que una mujer nunca debe llorar, y si lo hace debe hacerlo desahogandose y me gustaria te deshagogaras conmigo- dije casual

Me estremeci por aquellas palabras. "Desahogarte conmigo" Por algun motivo queria hacer eso, pero... ¿Como iba a llorar en el hombro del desconocido lo que no me atrevia a decir a Paul? ¿Acaso estaba loca? En el confiaba, tenia una relacion de años... - No deberia... - dije cada vez menos convencida.

le volvi a tender el celular y sonrei -venga ya... vamos llamale y dile que llegaras un poquito tarde- le sonrei mirandolka a los ojos, estaba casi lista bien!!!

Mire unos segundos sus ojos y le quite el teléfono con un suspiro, marcando el número sin atreverme a dar al botón de llamada. En su lugar le devolví el aparato y eché a andar. - Hablaré con el mañana. -Dije escogiendome de hombros.

sonrei ampliamente tomando el celular y guardandolo en mi pantalon para seguirla a la par conforme caminaba -bien, ahora un starbucks o un cafe noral en una cafeteria normal?- me rei volteandola a mirar

- Aún no me creo vaya a hacer esto... - Dije negando. - Supongo que me da igual, de todas maneras yo no tomó café... - Añadí escogiendome de hombros